Muchos de los procesos de selección se caen justamente porque las personas a cargo no consideran elementos fuera del perfil (que son los más objetivos) como el efe y la organización. ¿Cuál es la personalidad del jefe? ¿Con quien es compatible? ¿Quién le puede aportar? ¿Qué expectativas tiene? ¿Cómo es la organización? ¿Qué valores tiene la organización? ¿Cuál es su propuesta de valor de la organización?
A partir de estas preguntas que se realizaron al Gerente se procedió a implementar el proceso de selección y contrario a la expectativa del jefe de Recursos Humanos, la persona que fue seleccionada fue una mujer. Han pasado cuatro meses, y no solo ha pasado su periodo de prueba, está generando valor en el área, y no hay comentarios negativos sobre el trato del gerente.
Reflexión: Cuando hagas un proceso de selección es importante que el candidato/a se ajuste al perfil del puesto, pero no dejes de lado su compatibilidad con el jefe, el equipo de trabajo y la organización, que al final pueden ser los factores detonantes de la no adaptación del colaborador/a.